El simbolismo cósmico de María Jesús Bruna en la galería Orfila de Madrid
El simbolismo cósmico
La vivencia como núcleo del proceso creador, el entusiasmo ante la naturaleza de los materiales, y un formidable esfuerzo imaginativo, son algunas de las claves de la escultora María Jesús Bruna. Una artista que ha mantenido una actitud contemporánea comprometida, reflexiva y vital a lo largo de su trayectoria artística. Aunque su trabajo se inició en prácticas figurativas, su obra actual se decanta por la escultura conceptual, con el interés por la luz, el espacio y los materiales.
Bruna no conforma sus piezas con fórmulas monótonas, repetitivas y mucho menos de cerrado hermetismo. A la vivacidad que imprime siempre a sus obras, el ritmo, el dinamismo, se suma la potencia que destila la materia, a veces flotando como ecos o voces en el tiempo, otras desplegándose en un universo retiniano de centelleantes pulsaciones que reclaman un deseo, lo que podríamos denominar un "simbolismo cósmico". La autora intenta por todos los medios no mostrar una visión única, sino una secuencia cambiante de posibilidades, desplegando una especie de caligrafía gestual que evoca formas orgánicas y geométricas. En su trayectoria son habituales el uso de materiales reciclados y la combinación de estructuras de acero, así como la frecuente inclusión de pergamino e imágenes impresas sobre policarbonato, dando lugar a unas piezas en dónde se puede advertir una vaga insinuación al paisaje, con imágenes ascensionales y dinámicas, de lirismo fino, espontáneo y claridad envidiable.
En su discurso nos está también hablando de un mundo físico, de energías y de luz, que es la materia que hace perceptible la sombra y que fija los límites de lo que percibimos. No obstante estas obras van más allá de los sensorial trasportándonos al mundo de lo simbólico, con una profunda e indisoluble
unión entre vida y arte, pensamiento y arte. Con su naturaleza expresiva y evocadora y la coexistencia de varios lenguajes en su obra, consigue crear un tipo de lectura sinestésica, activando en gran medida nuestro imaginario y nuestros mecanismos de percepción.
Virginia Baig
Una nueva muestra personal en Madrid, en Galería Orfila, de la escultora oscense María Jesús Bruna refrenda su proyección estos últimos años, tras sus primeras exposiciones individuales en Aragón, como la Galería S'Art, Huesca, en 1978, y otras significativas en su carrera (Museo Pablo Serrano de Zaragoza y Museo Provincial de Huesca, 2001 y 2002), hasta las celebradas más recientemente en Barcelona, Málaga, Francia (Museo Pierre Bayle, 2013) e Italia (Museo Hebraico de Venecia, 2017). Sus esculturas se encuentran en espacios públicos de esta última ciudad y de numerosas localidades aragonesas, donde ha participado, también, en importantes colectivas ("Escultura Aragonesa de los 80", Museo Pablo Serrano, 2001), además de concurrir a ferias internacionales de arte en Seúl (Corea del Sur), Estocolmo (Suecia), Miami (EE.UU.), Toulouse, París y Mónaco (Francia).
La muestra se inaugurará el lunes 4 de febrero a las 19:30 en la galería Orfila de Madrid. En diálogo con las obras de la exposición, Violeta Borruel presenta una danza performance el jueves 14 de febrero a las 20 horas. (Texto e imágenes cortesía de galería Orfila)
arte contemporáneo
arte contemporáneo
arterritory.net
arterritory.net